Si colocas reductores de caudal en todos los grifos de tu establecimiento puedes conseguir que el consumo de agua se reduzca hasta en un 50%.
Un diseño óptimo y equilibrado de la jardinería va a permitir un ahorro considerable de agua y de las tareas de mantenimiento.
En las tareas de limpieza influyen tanto el consumo de agua como el consumo de sustancias químicas de limpieza.
¡El goteo de un grifo representa el despilfarro de 30 litros al día, es decir más de 10.000 litros al año! Chequea tus aparatos sanitarios, revisa tus hábitos de consumo y decide los cambios tecnológicos necesarios.
Seguro que el servicio es uno de los lugares más visitados en tu establecimiento, por eso allí el ahorro de agua es fundamental. Utilizando los sistemas de doble descarga en los inodoros se puede ahorrar hasta un 60% de agua.
El lavavajillas y las máquinas de hacer hielo son los equipos que más agua consumen. Actualiza tu cocina con aparatos más eco-eficientes y utiliza el programa “Eco” o de bajo consumo.
El vidrio tiene muchas vidas. Prioriza la reutilización del vidrio, es más ecológico y su impacto ambiental es inferior al producido por los envases de un solo uso.
Como usuarios, se genera más de un millón de toneladas de basura electrónica de las que 750.000 podrían ser recicladas.
El papel que se recoge y se recicla al año en España supone un ahorro de espacio en vertedero equivalente a 44 grandes estadios de fútbol llenos hasta arriba de papel y cartón. Recogemos para reciclar el 71% del papel que utilizamos.
Por cada botella de vidrio que se recicla se ahorra la energía necesaria para tener un televisor encendido durante 3 horas.
Reciclar un envase grande de yogur ahorra la energía necesaria para mantener encendida una bombilla durante 1 hora. ¿Imaginas lo que puedes conseguir reciclando toda la basura de tu establecimiento?
El tratamiento de la materia orgánica, además de generar compost como subproducto, produce biogás con el que se puede obtener energía eléctrica y térmica evitando las emisiones generadas por el metano.
Además de reducir considerablemente tus emisiones de CO2 obtendrás un abono ecológico de buena calidad.
Cocinar con un recipiente utilizando su tapa ahorra hasta un 25% de energía. Si, además, escoges el tamaño adecuado de sartén o de olla se puede llegar a reducir el consumo un 90%. Un simple gesto que marca la diferencia.
Cada grado de menos representa un 5% más de consumo.
Las bombillas LED permiten ahorrar hasta un 90% de la energía eléctrica consumida en comparación con las bombillas incandescentes, con la misma calidad de luz. La mayor inversión inicial se compensa por la vida útil más amplia que la de las convencionales.
Los equipos con etiquetado energético de la clase más alta son los más eficientes y pueden generar importantes ahorros en la factura eléctrica y menores emisiones de CO2. El menor consumo de energía a largo de la vida útil del electrodoméstico compensará el coste inicial, en algunos casos, superior. Los equipos con el etiquetado Energy Star pueden alcanzar ahorros en el consumo eléctrico superiores al 50%.
El 50% de los viajes en coche en la ciudad son inferiores a 3 kilómetros lo que supone un tiempo de unos 10 min en bicicleta. Además de incentivar el uso de los servicios de bicicleta compartida que ya operan en muchas ciudades españolas, puedes implementar otras medidas como crear aparcamientos para bicis o un espacio donde guardar sillines y cascos. Quizás también puedas hacer promociones para clientes que vayan a tu establecimiento en bici: ¡el medio ambiente puede ser una diferenciación en positivo!
El desperdicio de alimentos, además de las cuestiones éticas, supone un impacto en el medio ambiente y una enorme pérdida de recursos como agua, superficie agrícola y energía, que se emplean para producir los alimentos que finalmente se tiran. Ten en cuenta que el desperdicio alimentario es la tercera fuente mundial de CO2 tras EEUU y China.
Los productos de usar y tirar generalmente tienen una vida útil muy corta y suelen estar fabricados con materiales como el plástico o el poliestireno cuyos procesos de transformación son intensivos en el consumo de energía y, por tanto, en la generación de emisiones de CO2. La mejor opción es el uso de productos reutilizables por su menor impacto en el clima. En el caso de materiales hechos a partir de papel, utiliza papel con certificación FSC y garantizarás que están hechos a partir de madera de bosques gestionados de manera sostenibles.
La decisión de una compra responsable en un bar o un restaurante no está solo en los productos de alimentación y bebidas que se ofrecen al público, también puedes incidir en la elección de la ropa de trabajo, los artículos de merchandising que regalas, la mantelería que usas en tu establecimiento y cualquier motivo de decoración en el que se emplee tela (cubresillas, cortinas, etc).
Utilizando proveedores que apliquen criterios de sostenibilidad. Ponlo en valor, los clientes lo valorarán muy positivamente.
El consumo de productos realizados con materiales reciclados tiene un menor impacto en el medio ambiente durante todo su ciclo de vida. Estos productos cumplen la misma función que un producto no reciclado y alcanzan las mismas o mejores cuotas de calidad y de satisfacción para el usuario. Generan menos emisiones de CO2 porque la mayoría de productos y materias primas procedentes de materiales reciclados necesitan en su obtención menos energía que los procedentes del medio natural.
Utilizando proveedores que apliquen criterios de sostenibilidad. Ponlo en valor, los clientes lo valorarán muy positivamente. Prioriza proveedores lo más cercanos posibles y con productos autóctonos.
Ellos también forman parte de tu impacto en el medio ambiente. ¿La buena noticia? Puedes incluir información y señalética para que ellos también se unan contra el cambio climático.
Localización de los establecimientos: