Sibuya se ha convertido en el primer grupo hostelero que participa en un proyecto climático en su totalidad. Los establecimientos de Sibuya cumplen más del 50% de las acciones para reducir su huella de carbono con más de 750 medidas puestas en marcha entre todos los establecimientos del grupo.

Les hemos realizado una entrevista en la que nos cuentan qué les motivó a adherirse y lo que les motiva a llevar a cabo acciones que frenan el cambio climático. Todo lo que hacen, los ahorros que conllevan las acciones que tienen puestas en marcha... ¡Nos lo han contado todo!

Hemos hablado con Ángel Díez, director de Marketing de la corporación, para conocer de forma directa su experiencia:

Grupo Sibuya es la primera empresa hostelera en adherir todos sus establecimientos a Hostelería #PorElClima. ¿De dónde surge esta preocupación por el cambio climático? ¿Ha estado siempre presente? ¿Se está reforzando ahora de algún modo en especial?

Surge del propio crecimiento experimentado por el grupo. Con sólo 5 años de vida hemos abierto ya casi 30 restaurantes en España, pero el crecimiento no tiene que plantearse sólo en términos de cifras y negocio, sino que debe ser sostenibles e ir acorde con la realidad y las necesidades del mundo en el que vivimos. Por esta razón decidimos poner en marcha una estrategia de RSC enfocada en varios ODS de Naciones Unidas. De todos ellos, nos motivaba hacer algo relacionado con el número 13, ligado con la acción por el clima. Una materia que nos interesa como empresa, pero también a nuestro perfil de público objetivo: joven y preocupado por el futuro del planeta. Con estas premisas fue muy sencillo dar el paso para participar en el proyecto Hostelería #PorElClima, más cuando Coca-Cola, uno de los partners del proyecto, nos lo contó en detalle en una charla que tuvimos con ellos.
Antes de adherirnos a la iniciativa, en Grupo Sibuya ya estábamos llevando a cabo varias acciones para mitigar la emisión de gases de efecto invernadero. Pero, gracias a esta iniciativa, tenemos una plataforma donde reunir acciones, lo que prácticamente nos sirve para mantener una semi-auditoría medioambiental en continuo funcionamiento. Ello nos permite mejorar e ir implementando nuevas medidas.

¿Cuál es su estrategia global de sostenibilidad? ¿Cómo se aterriza y se adapta a cada uno de los locales?

Nuestra estrategia de sostenibilidad se basa en el cumplimiento de varios de los ODS de Naciones Unidades. Básicamente hemos hecho un plan de RSC que intentamos cumplir dentro de nuestras posibilidades y desde nuestro campo de acción como empresa hostelera.
Además de las actuaciones #PorElClima, vamos a desarrollar otra serie de actividades relacionadas con los objetivos de Hambre cero, Igualdad de género, Educación de calidad, Salud y bienestar, Producción y consumo responsables y Vida de los ecosistemas terrestres.
Muchas de ellas empiezan desde los propios restaurantes y otras se impulsan directamente desde los servicios centrales del grupo.

¿Qué elementos hacen de sus locales espacios sostenibles y singulares?

Nuestros locales son centros de experiencias sensoriales, en cuya arquitectura participan muchos materiales reciclados.
Un elemento muy característico de la decoración de nuestros restaurantes es la madera, que hace que sean cálidos y acogedores. En este sentido, tenemos que decir que prácticamente toda la madera que usamos en los revestimientos es reciclada y proviene de palés usados, con lo que le damos una segunda vida intentando que no se talen más árboles.

Emplear sistemas de doble descarga en los inodoros, utilizar iluminación por zonas, apagar las luces al final de la jornada, gestionar de forma adecuada los residuos? Parecen gestos sencillos y al alcance de todos. ¿Qué supone para Grupo Sibuya introducir este tipo de rutinas en el día a día de sus locales?

Parece sencillo, pero no lo es. Supone invertir en adaptaciones, en tecnología y, sobre todo, en procedimientos de trabajo y operativas que tienen que realizar las personas. Al final, la clave es conseguir un equilibrio entre automatización y gestión de personas. Sin este balance no sería posible poner en marcha ningún plan que conlleve actuaciones de este tipo.

Además de los beneficios para el planeta, estas acciones también conllevan ahorros de consumo y, por tanto, tendrá un impacto en las facturas. ¿En qué grado el cuidado del medio ambiente está vinculado con la rentabilidad?

Con la factura de la luz con los precios por las nubes, no es difícil imaginar que, mientras cuidamos el clima, podemos y debemos reducir nuestros gastos en consumo eléctrico con medidas simples pero efectivas. Ello termina reflejándose en la reducción de costes y, por tanto, en la cuenta de resultados de las empresas.
Es decir, utilizando argot hostelero, hacemos un 2x1: por el planeta y por nuestras cuentas.

¿Cómo se traslada el compromiso de Grupo Sibuya a su plantilla? ¿Y a sus proveedores? ¿Cómo les animan a que actúen #PorElClima?

A través de la implementación de planes de RSC que se difunden internamente con comunicados por los responsables de cada área y desde nuestra revista interna, BAO, que se entrega en todos nuestros locales y que se envía también a muchos de nuestros proveedores.

Y al cliente, ¿cómo le implican? ¿Se muestra receptivo?

Al cliente solemos implicarle a través de nuestras redes sociales. Contamos con un público muy joven y activo en estas plataformas que responde rápidamente a estímulos de cualquier temática relacionada con el medio ambiente. Es un público concienciado y sensible con este asunto capital para su futuro.

De entre todas las acciones que ponen en marcha para actuar frente al cambio climático en sus diferentes establecimientos, ¿hay alguna que quiera reseñar de especial manera?

Todas son importantes, pero actualmente estamos muy concienciados con la movilidad sostenible. Con la pandemia de la Covid-19 ha explotado el servicio de delivery y hace falta poner en marcha un transporte de pedidos a domicilio eficiente, eficaz y sostenible. En ese sentido, estamos probando con motos eléctricas, patines eléctricos, bicicletas? La idea es eliminar, en un plazo de tiempo razonable, todas las motocicletas de reparto que funcionan con motores de gasolina y que contaminan nuestras calles de humos y ruido.

¿Cuáles son los próximos pasos que se han marcado para reducir incluso más su huella de carbono?

Además de aumentar los vehículos de reparto sostenible, vamos a compensar nuestra huella de carbono con un proyecto de plantación de árboles que llevaremos a cabo a finales de año, y que financiaremos parcialmente con un porcentaje de la facturación de un nuevo plato sostenible que incorporaremos a nuestra carta dentro de unas semanas. Un proyecto en el que vamos a involucrar a nuestro cliente, como no podría ser de otra manera.